En las últimas semanas, a raíz del tan traído y llevado proceso contra Microsoft, han surgido muchas voces a favor o en contra de la "política comercial" de esta compañía. La verdad es que no me declaro ni defensora ni detractora del señor Gates. Creo que hay de todo, como en botica, y que algunos de sus productos son bastante buenos y otros, ciertamente, muy malos.

Lo que me molesta (y no me importa reconocerlo) es que me tengan "pillada" y, encima, saber que, probablemente, cuando accedo a la red el Gran Hermano posee la potestad (y seguro que la utiliza) de saber qué tengo instalado en mi máquina, si soy buena o mala, cuándo me conecto y qué demonios hago. Y además también se que puede contárselo a la DEA, a la CIA o al Sumsuncorda. Y todos me espiarán en aras de mantener mi libertad individual (si no has leido 1984, baja a la librería de la esquina y cómpralo). Qué le vamos a hacer.

Lo peor de todo, lo que no consigo digerir ni con bicarbonato, es que IBM, que ha contado con el OS/2, siga mirando al cielo en espera de algún mensaje en lugar de enterarse de que, quizás, la "política comercial" de facilitar al máximo la expansión de un sistema operativo sea beneficiosa para una compañía. No hace mucho, justo cuando Windows 95 era constantemente anunciado y nunca llegaba, IBM ya encontró la receta mágica de hacer que OS/2 Warp fuese anunciado en televisión sin entenderse qué era lo que se estaba promocionando (con el importe de la campaña podían haberse regalado cientos de miles de sistemas operativos y tomar una buena ventaja). No son las sentencias de un tribunal lo que me alegra o me preocupa. Son las actitudes contemplativas (del propio ombligo) las que hacen que algunas compañías sitúen sus productos mientras otras esperan alcanzar el Nirvana. Y yo, como usuaria, continúo pagando las clases de contemplación mientras espero que alguien se entere de que debería hacer algo (si es que, cuando se entere, aún está a tiempo).

Mientras esperamos a ver qué pasa con Windows 2000 o con la evolución de la famosa sentencia judicial, a los responsables de IBM les diría "¡ ánimo muchachos, estamos a punto de perder una nueva y magnífica ocasión !"

¿Hay alguien ahí?